Año 1990. Sábado en la mañana. Luego de despertar y agradecer a Dios por un día nuevo doy inicio a un día de muchas emociones. 17 años que se sienten como si fueran la gran mayoría de edad. Mi primera fiesta formal de gran pinta. Así es el comienzo de la edad de las mil maravillas y más cuando queremos ser libres sin pensar que apenas esto es solo el comienzo de una de las tantas etapas de esta increíble vivencia, de este gran niño que todos llevamos por dentro.
Entre alborotos y desorden del -¿y que me pongo para esta fiesta? Pasaban las horas de este maravilloso día. Eran los quince años de Pamela, amiga que estudiaba en el colegio Patronato. Colegio de puras chicas, así que no era tarea facil tratar de que no se escapara ni el más minimo detalle para impresionar a tantas chicas.
Como cosas naturales de la vida todos tenemos siempre ese gran amigo, casi como hermano, que va con nosotros para todos lados. -Mi hermano Carlos-. El traje, la camisa, los zapatos, la corbata, el nudo de la corbata, la colonia, la correa, que tengo que me falta -Carlos ya tienes todo? Asi se fue desarrollando el resto del día.
7:00 pm estamos listos, estamos muñecos como si fuera un disfraz, mi hermano Carlos y yo emprendimos nuestro rumbo a la rumba.
Casa Italia, salón fiesta de princesas y principes. No era parte de mi costumbre estas fiestas y mucho menos solo sin Mamá y Papá.
La entrada a la fiesta fue toda una indesicion, entre la pena y la inseguridad de dos adolescentes que se enfrentaban como si fueran dos adultos con la suficiente experiencia para desenvolverse entre las apariencias de esta fiesta que nos intimidaba y nos golpeaba humillandonos como diciendo niños ustedes no saben nada.
Entre tantos intentos para entrar a la fiesta que fracasaban una y otra vez, se nos escaparón dos horas. Hasta que por fin decimos a entrar. La recepción fue inolvidable, muchas chicas, una copa para el brindis y una Hermosa canción –tempo de vals, de Chayane-, que nos invitaba a bailar.
La fiesta fué como un cuento de adas, encontre a una princesa a la que pude besar a las 12:00 justo cuando sus padres se la llevaban. Fue un bonito amor que permanecio unido durante 7 años.
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